LA MACACHULA


Publicado por:

Aldair Guarupe

domingo, 27 de febrero de 2022


Era una muchacha que no hacía caso. La mamá le dijo que no se bajara del chinchorro que estaba en lo alto porque tenía su primera menstruación. La madre se fue a sacar yuca para hacer casabe y darle pescado rezado pero ella no hizo caso y se fue al caño acostándose en el puente y observando un pescadito llamado coli rojo, y le dijo: “¿uhy tan bonito!’’.  Llegaron los familiares de la muchacha a la casa pero no había nadie, saluEdaron, preguntaron para donde se fueron la gente y el Pabón que estaba asado contestó: ‘’yo no los vi para donde se fueron porque tengo los ojos ahumados, pero yo los escuché que por aquí pasaron hablando’’. La muchacha escupió en el caño, el pescadito recogió esa saliva y se la comió. Ella se fue a acostarse otra vez.

Después comenzó a llover y todo se inundó y de un rato a otro el nivel del río subió y llegaron toda clase de pescados a bajarla. Como ya tenía Pabón asando para rezarlo le preguntaron: “¿dónde está la muchacha?”. Le respondió el Pabón: “allá en lo alto yo la escucho. No la miré bien porque tengo los ojos ahumados’’. Los pescados celebrando hacían música, el carrizo tocaba maraca junto con el paletón que tocaba carrizo (flauta), por eso se le desgastó la parte de abajo de la cabeza. Tocaban tambores y otras clases de instrumentos debajo de la casa.

Mandaron al valentón que la bajara, pero este por lo pesado no alcanzó a brincar alto. Mandaron el amarillo igual, la payara brinco alto pero quedo colgada de los dientes, el agujón brinco pero paso por encima y así todos los pescados hicieron el ensayo de bajarla pero no pudieron quedaba el colirojo, brinco y le cayó en el pecho de la muchacha y bajándola se la llevaron los pescados, que cantaban y bailaban celebrando, por eso en cada agosto sube en su ribazón que es de puras sardinas (macachula jĩã yomo). Después que esto sucedió las otras muchachas ahí sí cogieron miedo.

 

Pasado un año la trajeron donde la familia y les dijo: ‘’mamá ustedes que me aconsejaron, ahora yo vivo en el rio en Venezuela por los lados de Palomo’’. Dicen que ven a una muchacha que se sienta en una piedra pero allá no puede llegar cualquier persona, solo los médicos tradicionales, porque la persona que vaya se desaparece cuando se levanta un chubasco.

Enseñanza: Las hijas deben ser siempre obedientes a sus padres, especialmente cuando están en ese periodo mestrual.

Como la saliva es un fluido que hace parte de nosotros no es bueno ni de buen comportamiento estar escupiendo por todos lados, sobre todo en rio o agua porque los espíritus del rio lo flechan y puede que le duela los dientes (muela) o le produce cualquier otra enfermedad.

Autor (es)

Narraciones del Pueblo Sáliba

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